Resignificación

Opinión

Ofrecemos este enlace con un comentario sobre la resignificación del Valle de los Caídos.

https://www.infocatolica.com/?t=opinion&cod=53379

La cabecera dice: "Lo que está implícito en el Valle de los Caídos"

Y el resumen: "La libertad es un tesoro incalculable, una perla preciosa. Lo que subyace en el debate de fondo sobre el Valle de los Caídos es la autonomía de la sociedad civil y la independencia de la Iglesia, y no que ambas con todas sus instituciones acaben siendo engullidas por un Estado en una deriva cada vez más arbitraria y totalitaria".

Juan Carlos Guirao Gomariz – 16/09/25 11:44 AM

Nuestro comentario.

Pues bien, en el caso del monumento de Navarra a sus muertos en la Cruzada, subyace que el Ayuntamiento no se crea con facultades para deshacer un monumento histórico, un edificio emblemático que está en la retina y memoria de tantísimos pamploneses, que expresa la historia de muchísimos navarros y de sus parientes que murieron en el Frente de batalla y, además, como legítima defensa frente el comunismo y el separatismo. 

Subyace también el respeto a lo que los hombres de hoy no han generado, a lo que el monumento ha significado para los que lo  levantaron -la Diputación Foral- y para la Iglesia diocesana que lo acogió como un regalo. Que la Diócesis no podía mantenerlo más parece una triste excusa de ciertos eclesiásticos, porque ya se han podido mantener otros inmuebles y ya piden dinero para otras muchas cosas. Un regalo el monumento que -decimos- en 1997 pasó al Ayuntamiento pamplonés pero con condiciones. No exigir el cumplimiento de éstas, que en varias ocasiones se han quebrado, es una nueva torpeza de gente temerosa.

Más aún, se trata de unos cargos municipales que ocupan los centros de decisión del Ayuntamiento, que sobre todo carecen de mayoría social, y que no pueden decidir aspectos de todos los pamploneses y de varias generaciones. 

Sí, lo más revolucionario es cargarse todo, saltarse todo, no respetar nada... el nihilismo. ¿Y después? ¿Quién podrá reclamar algo -incluso una multa- ante una administración política totalizadora y totalitaria? ¿Por qué se mantendrá lo que ellos construyan? ¿Qué no se diría si el monumento de Navarra lo fuese a los milicianos y brigadistas, y hasta los cinco gudaris? ¿Por qué se concede a los revanchistas lo que no se concedería a nadie más? ¿Es el triste "prestigio" del terrorismo? Y tantas otras cosas. Pero sobre todo digamos que el odio y la revancha ideológica nada construye.

El observador inquieto