Qué había detrás de tanta denuncia y exhumaciones

NOTA

VALGA una sencilla relación -aunque no se corresponde exactamente con la realidad de los personajes- para mostrar lo que muchos piensan y nadie dice por falta de iniciativa, por dejación o bien por temor.Utilizamos un argumento "ad hominem" -el del contrario- para ilustrar lo que queremos decir

Puigdemont  = general Sanjurjo (con perdón)

Lluís Companys = general Mola (con perdón)

Los que han exhumado por fuerza, con presiones sobre el arzobispado y en contra de los parientes, los restos mortales de Sanjurjo y Mola y de buena parte de los seis voluntarios que les flanqueaban en la cripta del Monumento de Navarra a sus muertos en la Cruzada, ¿de qué se quejaban? 

Lo que había detrás de tanta denuncia a Mola etc. y de las exhumaciones ha sido un marxismo agazapado, un revanchismo político que poco o nada tiene que ver con la realidad. Máxime cuando por lo visto sólo han podido y pueden actuar ellos y no otros que tendrían tanto o más motivo. Ellos disponen de un texto legal sectario que a su vez manipulan a sus anchas, tienen mil medios públicos, tienen una obsesión revanchista y guerracivilista, y la prensa les da pábulo. Por su parte, los otros carecen de cobertura legal, de medios, creen que no está bien desenterrar todo un país de  hace 80 años, y carecen de una prensa que es evidente que se escora en una dirección única sobre lo que han convertido en lo "políticamente correcto".  

Lo siento realmente por los parientes -generalmente lejanos- de las víctimas, utilizados una vez más por quienes dicen reivindicarles. Están en su derecho de decir algo, pero al menos sepan que los parientes de otros callan.Sí, realmente lo sentimos. 

¿De qué se queja el sr. Asirón que apoya el Golpe de Estado de los Puigdemont, que ensalza al más que violento Companys, y que no condena el terrorismo etarra?

¿De qué se quejan los encargados ayer de presionar al sr. Arzobispo, de hacer teatro delante del citado monumento de Navarra a sus muertos en la Cruzada, y de presentarse haciendo política de partido con una pancarta republicana una y otra vez? 

Cuando lo hacían, no probaron muchas cosas, que dieron por supuestas con una excesiva rotundidad y sin duda con amenazas. Para ellos cualquier formulación mental es un instrumento de lucha ideológica en el presente. No hace falta que nos digan que hubo cunetas, condenables y cuyos hechos desde hace tiempo están en manos de la justicia divina. También hubo otras y muchas más cunetas en la Cataluña de Companys, a quien después de 80 años se le rinden homenajes. Quisieran ellos levantar la tierra de media España, pero la de un solo lado... para su ensayo ideológico y utópico. Nosotros preferimos dejar a todos en paz y ceñirnos a la realidad y al futuro que enseguida es presente. 

 ¿Se quejan de Sanjurjo Sacanell por golpista allá hacia 1932 y 1936, cuando hoy -año 2017- ensalzan al golpista Puigdemont?

¿Se quejan de la represión por el general Mola, el director del alzamiento, cuando homenajean a Companys, que tiene en su haber tres veces las cifras de represaliados con los que acusan a Mola -tema este del que habría que hablar-? Además, de lo ocurrido en Navarra habría mucho que hablar por lo que respecta a las circunstancias y al propio Mola. Visto lo visto, ya no queremos comulgar con ruedas de molino. 

Tanta contradicción en quienes presionaron lo indecible para  la exhumación de los restos mortales de Mola Vidal estaba avisada en diferentes entradas anteriores de este Blog. Sumen a ello lo sinsorgo de la "argumentación" para exhumar los restos mortales del pamplonés y héroe laureado de las campañas de África, don José Sanjurjo Sacanell, que murió de accidente justo cuando el alzamiento. Y sumen también la tontería del argumento de "franquistas" de los seis voluntarios que salieron al campo del honor para defender la religión perseguida y a España de manos del golpismo de izquierdas, del caos provocado, y del comunismo, con independencia del que será general en jefe general F. Franco.  

Añadamos que los amigos de Puigdemont, de Companys, de Carrillo, de la Pasionaria y de tantísimos otros, aplican su propio esquema ideológico a quienes se proponen exhumar del pasado para hacer hoy política con ellos. Basta un mínimo pretexto para que todo manipulen el ayer lejano, llegando incluso a destrozar la fama de cualquier persona y realización. 

Mientras por entonces unos llevaron sus planes a la práctica allá donde pudieron, hoy otros que siguen sus pasos y atribuyen a sus contrarios las intenciones, finalidades y propósitos de los primeros, y hasta lo que hicieron, esto es, aplicar unos propósitos de limpieza (étnica, lingüística, ideológica) y un  menosprecio por el hombre concreto, la legalidad y la convivencia. 

En 2015, los nacional separatistas y la ultra izquierda  en Navarra, amigos de Puigdemont, de Companys etc. actuaron contra el Monumento de Navarra para esconder así el actual golpismo separatista por venir y el terrorismo etarra ya nocurrido. Lo feo del presente se quiere esconder realzando y no pocas veces mintiendo sobre lo feo del pasado... pero de otros. 

En 2015, los mismos que aplauden a Puigdemont y Companys también actuaron contra los casi 5.000 navarros muertos en el frente de combate, quizás para justificar el Gulag siberiano, la huida de miles de vascos de su tierra natal, la labor del terrorismo etarra, y tantas otras cosas. 

Ramón de Argonz y de la Urrutia