La Inmaculada Concepción y San Miguel,
dos preciosas imágenes y enseñanzas
para nuestro tiempo.
Es un gran motivo de esperanza. En la parroquia de Santa María de Tafalla se conserva un hermoso cuadro de la Inmaculada Concepción a la derecha de la entrada en el templo. Es Ella quien aplasta la cabeza de la serpiente cuando ésta intenta morderle el talón.
Asimismo -fortaleciendo el espíritu luchador contra los siete pecados capitales-, el San Miguel guerrero vence al ángel caído representado en el retablo de la izquierda de la muy espaciosa y alta nave de dicha parroquia.
La Iglesia parroquial de Santa María es amplísima y muy hermosa. El edificio experimentó numerosas obras que le dan el aspecto que tiene en los siglos XVI a XVIII, aunque sus orígenes deban remontarse a la época medieval. Se llamaba iglesia de El Salvador. De la Edad Media no quedan casi restos, aunque tendría una amplia nave gótica, semejante a otros emblemáticos edificios del Reino de Navarra propios de los siglos XIII y XIV, tales como la parroquia de San Saturnino de Pamplona o bien la iglesia de Artajona que domina en altura el cerco militar tan bien conservado en ésta bella localidad.
Vaya nuestro recuerdo para dos amigos carlistas de siempre, Joaquín Suescun Araiz y José María Orive Ezquerecocha, que me acercaron a la ciudad Tafalla, la ciudad de "Templau" y de nuestros días. Todos los años se oye cantar muy bien a los tafalleses ante Ntra. Sra. de Ujué. Con su recuerdo vuelvo uns y otra vez a la ciudad del Cidacos, que tan próxima está al palacio Real de Olite.
José Fermín de Musquilda
Tafalla, 9-XII-2017
No hay comentarios:
Publicar un comentario